REDUCCIÓN Y PEXIA
La mamoplastia reductora y la mastopexia (elevación y fijación de la mama) son dos intervenciones distintas pero con muchas similitudes en cuanto a la técnica quirúrgica.
En ambas se suele elevar el complejo areola-pezón, se modifica la forma de la mama y se reduce la piel sobrante.
Mientras que en la mastopexia se realiza con poco o ningún cambio de volumen de la mama, en la reducción se reseca parte de la glándula mamaria para disminuir el volumen final.
OBJETIVOS
Reducir el volumen mamario y conseguir una mama armoniosa y estable en el tiempo.
- Resección de parte de la glándula mamaria
- Resección del exceso de piel. Para acomodar la envuelta al nuevo volumen mamario parte de la piel también tiene que eliminarse. El patrón utilizado determinará las cicatrices cutáneas y el resultado final.
- Remodelar la mama: dar una forma armoniosa a la mama es un objetivo prioritario tanto en la mastopexia como en la reducción mamaria. El remodelado interesa tanto a la piel como a los tejidos profundos y glandular.
- Areola-pezón: preservar la vascularización del complejo areola-pezón es importante, independientemente de la técnica quirúrgica utilizada. En los casos de hipertrofia muy severa, puede ser necesario un injerto libre de la areola-pezón.
(Pexia: deriva del griego –pexis- que significa fijación)
Debido a que los procedimientos utilizados para reducción y pexia son similares, los objetivos también los comparten. En la mastopexia la resección de tejido es menor y el remodelado de la mama tiene un papel más relevante.
TÉCNICAS QUIRÚRGICAS
Aunque hay descritas numerosas técnicas y variantes para reducir y elevar las mamas, todas ellas comparten similitudes técnicas y los objetivos anteriormente descritos
Cada técnica tiene sus indicaciones. Todas pueden proporcionar buenos resultados si las mujeres son seleccionadas adecuadamente. En definitiva, la técnica a utilizar va a depender de las características de la mama y de la comodidad que tenga el cirujano con un procedimiento determinado.
